Estaba dormido. Adentro del sueño, estaba en casa de mi abuela materna, Cuca. Estaba de mi primo, Aarón, estudiaba ingeniería, le dejaban problemas de física. Me preguntaba sobre los problemas de física, yo le respondía particularmente que si se podía hacer invisible, solo era cuestión de mover rápido la mano, para que no se viera, y se volviera invisible. Respondía asombrado. En el sueño, se trataba el asunto de la materia, y de su cualidad para dejar de estar en un lado, y entrar en otro. Había una explicación bastante lógica y clara, cuando de repente, entré al estado del sueño, en donde "se sube el muerto".donde se está entre dormido y despierto.
Ese estado del sueño, tiene la cualidad de estar entre dormido y despierto. Da pánico ese estado del sueño. En ese estado, vi un extraterrestre frente a mi rostro, estaba acostado frente a mí, era ET, cambiando de forma a un extraterrestre de ojos grandes, obscuro, como verde obscuro (ya lo había visto en otros dos sueños); lo tenía de frente, se sentían sus mejillas suaves y calientitas (lo que es bastante difícil en ese estado del sueño, donde se está entre dormido y despierto, ya que allí las sensaciones que he llegado a tener son desagradables, como de animales que muerden, como serpientes con grandes colmillos, o duendes aterradores con pequeños cascabeles). Únicamente dos veces en toda mi vida, dentro de estado del sueño, entre dormido y despierto, tuve la oportunidad de sentir sensaciones agradables: en ambas era la sensación de un perrito en una estaba calientito, en otra, su lengua se sentía chistosa, y en otra se sentía su aliento. Aunque causaba pánico, esas sensaciones corporales me daban calma. La sensación del extraterrestre era suave y calientita, como la sensación del perro. El extraterrestre me dijo que había otro espacio al que podía entrar la materia, lo que estableció una coherencia con el sueño anterior: entonces logré trasladarme a ese otro espacio, en donde adquirí consciencia, como en la vigilia.
El espacio dentro del sueño, en donde se tiene consciencia, tengo la hipótesis que se trata del denominado Alchera, "(...) una de las primeras y más claras definiciones de un mundo alterno, un espacio-tiempo derivado del tiempo de los orígenes y al que se accede a través de la experiencia onírica humana", mencionan los antropólogos Bartolomé y Barabás (2013). En este espacio transcurren los mitos (Bartolomé y Barabás, 2013). Se trata de un espacio que tiene la cualidad de dotar al cuerpo de consciencia: se puede mover con voluntad. Otra característica de ese espacio, es que tiene continuidad, es decir, se puede hacer vida cotidiana allí. No es un lugar al que se accede una sola vez.
Me trasladé a ese espacio, al Alchera, como si me hubiera teletransportado, es decir, mi masa dejó de estar en el sueño, y estuvo inmediatamente en ese otro lugar. Mi cuerpo se teletransporta a ese otro lugar. ¿Qué lugar es? Me recibieron, eran jóvenes. Uno de ellos me hablaba de la cualidad de la materia de transportarse de un lugar a otro, mientras me ayudaba a teletransportarme. Se escuchaba como científico. Fue difícil teletransportarme, porque había que ir del sueño, a su planeta. Sé que era otro planeta, porque él me lo mostró cuando llegué allí. Me dijo que estaban haciendo una revolución. La ciencia, su herramienta. Se centraban en los genes. Cuando entré, vi a quién me guió en la teletransportación, y a un grupo de jóvenes. Se veían con jubilo, motivados, tenían un semblante de inteligencia, mezclado con juventud y entusiasmo por hacer aquella revolución. Se veía que se escondían, como revolucionarios que tienen algo nuevo, y necesitan esconderse del poder, al que se enfrentan. ¿Qué habrá pasado en su planeta para que hicieran una revolución? No tengo idea, ya les preguntaré. Tenían aire de revolucionarios, se veían muy inteligentes y sagaces. Uno de ellos tenía una computadora. ¿Qué computadora sería? No lo sé.
Estaban en ese lugar, en ese planeta, a donde lograron llevarme, utilizando como vía, el sueño. En otras palabras, del sueño se agarran ellos, para poderte teletransportar a su planeta. Una vez allí, se siente la corporalidad de la vigilia, se siente el cuerpo idéntico al del tiempo de la vigilia, se puede incluso hasta pensar que es otro cuerpo. Voy a dedicar un capítulo especial a la adquisición de consciencia del cuerpo, en ese lugar. Se distingue claramente de un sueño. Es como si ellos lograran saber que la materia se puede trasladar a velocidades demasiado rápidas, de tal manera que el estado de vigilia no lo permite, por el peso de la masa, y la manera de lograrlo, es a través del sueño, y del sueño, ya poder teletransportar la materia, obvio, dejando la materia original. La descripción de ese lugar necesita un capítulo especial, porque no tengo más palabras, más que decir, que la corporalidad de la vigilia es la misma, y la consciencia de movimientos es la misma, en otras palabras, el cerebro no trabaja igual en ese lugar. Mi recibimiento fue de bienvenida al equipo de revolucionarios científicos, me dijeron que si tenía publicaciones de genética, les constesté que no, pero que podía ponerme a aprender. Entonces desperté, lo hice sudando bastante.
Bartolomé y Barabás (2013). Los sueños y los días. Chamanismo y nahualismo en el México actual. III. Pueblos de Oaxaca y Guerrero, México: INAH.
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